Un sistema de amortización es un conjunto de cálculos que se usan para fijar la forma en que se pagarán las cuotas de un préstamo, tomando en cuenta la tasa de interés, el plazo elegido y el monto pedido. En este artículo, exploraremos los diferentes métodos y explicaremos sus características.
A la hora de sacar un préstamo las entidades ofrecen distintas modalidades de pago. Francés, alemán y americano son algunos de los modelos que se plantean como metodologías para que una persona cancele mediante cuotas un financiamiento.
Antes de iniciar las explicaciones, es importante mencionar que la cuota de un préstamo (en general) se compone por capital, interés e IVA de los intereses (10,5% del valor de los intereses). En ocasiones y dependiendo del banco, puede incluir otros conceptos como gastos administrativos o seguros. Por ello, es recomendable antes de firmar el financiamiento solicitar un cuadro de marcha en donde se explique la cantidad de cuotas, su composición y su fecha de vencimiento.
Sistema francés: Cuotas iguales
El sistema francés es un modelo en el cual las cuotas son iguales y con la particularidad que a medida que va avanza el tiempo, el importe de capital representa un mayor porcentaje de la cuota. Esto se debe a que los intereses van disminuyendo al avanzar el plazo, pues se calculan sobre el saldo de la deuda.
Es importante mencionar que en nuestro país las cuotas no son exactamente iguales ya que pese a que la sumatoria de capital más intereses es idéntica, el IVA sobre estos últimos (10,5%) modifica el importe final.
Es ideal para préstamos a tasa fija y de largo plazo (hipotecarios) ya que permite realizar una buena planificación y en contextos inflacionarios una cuota “constante” representaría cada vez menos porcentaje de ingresos de una persona. Sin embargo, no es conveniente si se desea cancelar anticipadamente dado que la mayor parte del capital queda a pendiente de pago hasta la última mitad de la vida del crédito.
Sistema alemán: Cuotas distintas pero capital constante
Este sistema ofrece una amortización (cancelación) constante del capital. Aquí, las cuotas van disminuyendo con el paso de los meses o años debido a que el pago de capital se mantiene idéntico a medida que transcurre el plazo y los intereses se calculan sobre el saldo adeudado.
Dada las características, un crédito con sistema alemán puede ser poco recomendable para PYMES o emprendedores Dado que requiere desembolsos más importantes al comienzo cuando, quizá, el negocio todavía no está generando ganancias suficientes.
Sistema americano: El capital al final
Es una técnica que no suele ser común en Argentina y que está basado en que todas las cuotas (salvo la última) se forman únicamente por intereses. Por estos detalles, es el esquema donde más intereses se pagan, dado que el capital no se reduce a lo largo del tiempo.
La idea de esta propuesta es que el deudor genere ahorros durante el plazo del préstamo para poder realizar al finalizar el pago total.
En la teoría financiera se aconseja para modelos de negocios donde se obtengan ganancias en un determinado momento o en las cuales no exista un flujo mensual de ingresos. Un ejemplo clásico es de la actividad agropecuaria, donde el productor saca el préstamo para comprar insumos y maquinaria y al final de la cosecha, con las ganancias obtenidas, abona el 100% del saldo adeudado.