La titular de la Administración Federal de Impuestos, AFIP, Mercedes Marcó del Pont confirmó que la semana que viene se reglamentará la ampliación de la moratoria.
“El objetivo de la ampliación de la moratoria no es recaudatorio sino aliviar la mochila que cargan los contribuyentes con la AFIP. Es una herramienta más del Estado para amortiguar daño, sostener los puestos de trabajo y encarar el proceso de recuperación después de la crisis a la que condujo el gobierno anterior y que profundizó la pandemia. Queremos que los contribuyentes estén en condiciones de volver a funcionar”, expresó.
La expectativa es que buena parte de las empresas chicas y medianas del país entren en este nuevo proceso pero no se sabe aún qué porcentaje de las grandes compañías se sumarán, ya que establece varias restricciones respecto del mercado cambiario, señalan desde Infobae.
Como el presidente Alberto Fernández anunció públicamente la intención de lanzar una nueva moratoria mucho antes que se enviara el proyecto al Congreso, muchas empresas y particulares empezaron a retacear sus pagos a la espera del anuncio que les propusiera un plan de cuotas, y esto hizo que al momento en que se presentó el proyecto en Diputados se acumulara una deuda de $281.700 millones, que se suma a los $230.000 millones que ya se encontraba en diferentes planes de pago.
Otra particularidad es el artículo que establece que las grandes empresas que quieran participar de la moratoria quedarán excluidas del mercado cambiario para el pago de algunas operaciones. Básicamente, se les prohíbe durante 24 meses distribuir dividendos, realizar operaciones con títulos y acceder al mercado del dólar para realizar pagos a entidades vinculadas.